martes, 25 de octubre de 2011

Juegos “Essenciales”

“No dejamos de jugar porque nos hacemos mayores. Nos hacemos mayores porque dejamos de jugar.” (George Bernard Shaw)

Probablemente muchas personas vean este hobby de los juegos de mesa, por lo menos a partir de ciertas edades, como algo inmaduro e inapropiado, pero, ved, amigos, ese prejuicio precisamente no figura entre los míos: exactamente como un niño con un juguete nuevo o como un perro al que le acaban de dar un suculento hueso estoy yo con las novedades de Essen que ya han empezado a llegarme. Sobre esta multitudinaria feria internacional que se celebra en la mencionada ciudad de Alemania todos los años ya adelanté algo en un post del mes pasado (éste). Todos los ludómanos esperamos con ansiedad y gran interés este momento por las muchísimas novedades y propuestas que se estrenan en ese señalado fin de semana de octubre. Este año, personalmente, me propuse centrar mi interés en cuatro juegos que se pusieron a la venta la semana pasada con motivo del certamen: Ghost Stories: Black Secret, Colonial, Ora et Labora y Dungeon Petz. El tercero citado ha visto un retraso en su edición en inglés, pero los otros tres ya los he adquirido vía internet y espero ir recibiéndolos a lo largo de esta semana y la que viene. De momento ya me ha llegado el primero; los otros dos los añadiré a este post conforme estén en mis manos.

Ghost Stories: Black Secret
Como también adelanté, el juego de Repos Productions diseñado por Antoine Bauza es la segunda y supuestamente última expansión para el popular Ghost Stories que apareció en 2008 (la primera fue White Moon). Se trataba de un juego colaborativo ambientado en una aldea china del pasado que los jugadores deben defender de una incesante horda de fantasmas y criaturas demoníacas hasta lograr enfrentarse finalmente al líder de todas ellas: el malvado Wu-Feng. Pues bien: con el nuevo Black Secret, el juego deja de ser colaborativo para pasar a ser competitivo, ya que ahora uno de los jugadores representará al infernal caudillo del más allá y tratará de hacerle la vida imposible a los monjes taoistas que son sus rivales. Hay espacio pues, con esta opción, para hasta cinco jugadores (antes sólo podían jugar cuatro), uno de los añadidos que más me gusta de la expansión. Como siempre, un montón de nuevas opciones: cartas, fichas, losetas, muchos colorines… Espero poder hacer la reseña de toda la serie en breve. De momento os dejo una foto del juego recién abierto. ¡Ah!: también me han regalado una carta promocional de Steven Qi-Gal, ja, ja… Todos los años Repos saca humorísticas cartas promocionales para Essen con personajes de películas de artes marciales (hasta ahora: B-rice Lee, Chuck No-Rice y Jean Claude Van Rice, aparte del ya mencionado) y hasta con grupos musicales (¡los Village People!).


Dungeon Petz
Dungeon Petz, del popular diseñador checo Vlaada Chvátil y publicado en inglés por Z-Man Games viene avalado por su divertídisimo precursor, Dungeon Lords. Se trata en realidad de un título totalmente independiente del otro, sólo que se ambienta en el mismo mundillo de fantasía y que igualmente ha sido ilustrado por David Cochard, sin lugar a dudas una de las principales bazas del juego junto a la excelente calidad y presentación de sus materiales. Hasta cuatro jugadores emplean a su correspondiente familia de diablillos para que compren y cuiden mascotas de criaturas imaginarias y “monstruosas” con el fin de venderlas luego a los “Señores de Mazmorras” que dan nombre al otro juego y acumular así prestigio. Este nuevo título del señor Chvátil no se escapa pues de los típicos eurogames de gestión de recursos, con la obvia excepción de su temática y ambientación.


Colonial
Con el largo subtítulo de “Europe´s Empires Overseas” este primer juego de la empresa suiza Stratagem, firmado por Christophe Pont, se ambienta obviamente en la época de la colonización y los descubrimientos, y abarca más o menos los siglos XV-XVIII. Cada jugador representa una potencia europea que intenta expandir su imperio fundando colonias, explotando sus recursos y habitantes y enriqueciéndose con ello. Los jugadores usan cartas de personaje para sus acciones, encontrándonos con arquetipos como el conquistador, el misionero, el mercader o el científico... Por supuesto, hay también cabida para los piratas, los indios rebeldes y la guerra entre potencias. A priori, lo que más me gusta del juego es su ambientación histórica y que tenga cabida para media docena de jugadores, hoy en día una rareza. Veremos que tal está...


Me he quedado con las ganas del Ora et Labora de Uwe Rosenberg, pero habrá que esperar a que salga la retrasada edición en inglés...